La aparición de nuevas metodologías de aprendizaje se han tomado las aulas de todo el planeta. En nuestro país, varios son los establecimientos educacionales que se han optado por un método no tradicional de enseñanza.

Un ejemplo de ello es el Liceo Manuel de Salas (LMS), ubicado en la comuna de Ñuñoa, donde se eliminaron las notas para los alumnos de primero y segundo básico, además de alargar los recreos.

Esta medida, implementada el año pasado en un plan piloto para los primeros básicos, se extendió a los estudiantes de segundo básico, a quienes les aplican evaluaciones cualitativas.

Según explicó a CNN Chile la encargada de la Unidad Técnico Pedagógica del liceo, María Correa, se reemplazaron las notas por estándares que van del “Logrado” hasta el “No Logrado”.

Los apoderados se muestran conforme con la implementación de esta nueva metodología, quienes comentan que favorece la motivación por aprender de los estudiantes.

El sistema que implementó el LMS, el cual depende de la Universidad de Chile, es similar al que utiliza el país líder en métodos de enseñanza, Finlandia, donde está prohibido evaluar a los menores de 14 años con calificaciones numéricas.

La extensión de los recreos en 15 minutos, fue la otra medida que adoptó el liceo, con lo cual esperan disminuir el estrés y mejorar la disposición al aprendizaje de los estudiantes, para que sobrelleven mejor la jornada escolar.

Otro establecimiento que implementó una metodología nueva, es el Colegio Mayor de Peñalolén, donde hace 5 años utilizan la metodología de “aulas invertidas”, el cual tampoco utiliza evaluaciones numerales.

Esta metodología consiste en proporcionar material sobre un tema determinado para que los alumnos accedan en su hogar. En clase, posteriormente se trabaja ejercitando o profundizando su contenido, complementando con trabajos colaborativos y clases tipo taller.

El director del Colegio, José Miguel Arriagada, comenta que estos cambios paradigmáticos son necesarios para que los niños evolucionen de la mano con la sociedad.

Así, cada vez son más los establecimientos que se atreven a innovar en sus metodologías de enseñanzas para beneficio de los estudiantes, ante lo cual apoderados también presentan su confianza.

Metodologías más humanas

Para la experta en educación de la primera infancia de la Universidad Católica, Candelaria Navarro, destaca el impacto social que tiene esta forma de enseñanza, catalogando como un método “más libre y más humana”.

La especialista concluye que el método tradicional estaría quedando obsoleto, ya que “solo genera miedo, incomprensión y distancia con el proceso de aprender”.