Con sillas, mesas y banquillos fueron bloqueadas las entradas al campus Casa Central de la UC, luego de que a las 7 am estudiantes entraran y tomaran uno de los patios interiores. Bajo la consigna feminista, buscan presionar a las autoridades para concretar una reunión y presentarle al rector Sánchez el petitorio redactado tras las jornadas de paro de la semana pasada.

180 alumnos bloquearon los accesos al patio Juan Pablo II, donde se mantienen concentrados. El rector se encuentra en reunión con el Honorable Consejo Superior junto a las autoridades de la universidad y el presidente FEUC, Francisco Morales.

Ignacio Sánchez tuvo acercamientos con los manifestantes, sin embargo, se retiró a los pocos minutos junto a otros miembros del Honorable Consejo Superior, y no dio declaraciones hasta terminado el Consejo. “Queremos el diálogo, pero el rector lo único que ha hecho es dar declaraciones sin consultarnos”, declaró Daniela Pazos, vocera de los estudiantes que realizaron la toma.

Los estudiantes tienen el acceso bloqueado al patio. Quienes vigilan las entradas permanecen encapuchados y reciben apoyo de estudiantes simpatizantes, quienes han hecho llegar insumos básicos como agua, papel higiénico y alimentos. Por otro lado, también han ingresado estudiantes en contra de la toma, que han manifestado su descontento ante la iniciativa, pero que se mantienen en los patios colindantes sin poder ingresar junto a académicos y administrativos.

“Hoy se habla de alrededor de 37 denuncias de abuso o acoso. Esas son situaciones graves que no pueden seguir ocurriendo en nuestra universidad. Pero creemos que hay que agotar primero los mecanismos de diálogo y los mecanismos formales para poder generar estos cambios”, manifestó Magdalena Lira, presidenta del CADE, y quien se mostró a favor del movimiento feminista durante la semana pasada, pero que rechaza la radicalización.

Desde la FEUC, redactaron un comunicado que llama al diálogo, pidiendo la normalización de la situación. “Esperamos que no se reprima con actos violentos a nuestras compañeras y buscamos que se logre entablar un diálogo entre las partes que llegue a un eventual acuerdo que permita retomar las actividades con normalidad y avanzar en las demandas de las compañeras”, agregaron.

A eso de las 15:40 horas, el rector Sánchez aclaró los puntos tratados en el Honorable Consejo Superior. «Hemos mantenido un diálogo muy permanente, por eso me llama la atención esta toma, que es un acto muy violento, antidemocrático», declaró Sánchez, quien hizo un llamado al diálogo y a la cooperación de los estudiantes para mejorar los protocolos existentes en la universidad.

En cuanto al desalojo y a los posibles sumarios, el rector solicitó que la toma se mantuviese pacífica y sin daños a la universidad, y aclaró que «hoy día no vamos a hacer un desalojo. Nosotros como comunidad universitaria tenemos que dar un ejemplo de diálogo. Hago un llamado a los estudiantes para que estén tranquilos, no va a haber ningún desalojo». Agregó, además, que «si no hay daño al patrimonio, el objetivo no es hacer sumarios a los estudiantes, sino que queremos educarlos».

Si bien Sánchez se mostró comprensivo con las demandas y el movimiento feminista en sí, y que gran parte de la comunidad universitaria también lo hace, declaró que:

«La toma nos violenta, nos apena y produce una incomodidad muy grande a la comunidad universitaria» – Ignacio Sánchez